Existen muchas expectativas sobre las mujeres en el tema de maternidad. Primero, se espera que en cierto momento de la vida, nos convirtamos en mamás sólo porque naturalmente podemos serlo, si nos convertimos en ello, se espera que seamos mamás de tiempo completo, pero también se espera que no seas “sólo mamá”, se espera que no seamos mamás de un solo hijo para no dejarlo “solo”, se espera que seamos el ejemplo perfecto de paciencia, amor, formación de límites, entre muchísimas otras cosas…. Son tantas expectativas alrededor de lo que significa ser mamá.
A mi parecer, ser mamá debería de ser una elección en plena consciencia , no solo serlo porque es el siguiente paso en la vida o en el matrimonio. Yo soy mamá de 2, con toda consciencia así lo decidí, los busqué, los esperé y llegaron para darme la inmensa fortuna de conocer un amor fuera de cualquier conocimiento, entendimiento y límite.
Aún así fueron, sobretodo los primeros años, llenos de muchos sentimientos encontrados. Ser mamá es difícil, es cansado, es retador, agotador y cambia por completo tu vida, tu cuerpo, tu ritmo, tu productividad, tu vida profesional, tu sexualidad, tu matrimonio. Nada es lo que esperas que sea, es más, es mejor, pero es un torbellino de emociones. Si todo esto pasa cuando los deseas, los esperas y cuando por elección propia dejas en pausa tu vida entera para dedicarte a ellos los primero años, no puedo imaginar lo complicado y difícil que debe de ser para una mujer ser mamá sólo porque era el siguiente paso.
¿Consejo? Sé mamá sólo si deseas serlo. No será bueno para ti, ni para tus hijos tenerlos si es por cualquier otra razón. Estoy segura que mis hijos me eligieron para ser su mamá, para tenerme como guía y maestra, porque tengo y carezco de todo lo que necesitan o no de mi, como parte importante de lo que su alma necesita para aprender y evolucionar en su tránsito por esta vida.
Soy la mamá que necesitan que sea para ellos, lejos aún de lo que yo misma considero esa guía perfecta pero que me muevo con ellos y para ellos desde el amor, desde la consciencia de observarlos, entenderlos, enseñarlos a vivir y disfrutar cada cosa que hagan en la vida. Quiero enseñarlos a vivir en plena consciencia, a disfrutar, a decidir, a valorar lo importante, a desechar lo que no lo es, a divertirse, a viajar ligeros, a pedir lo que necesitan, a rechazar lo que los lastime, a identificar sus emociones, permitirse sentirlas y seguir adelante, quiero que aprendan a ser libres de alma y de pensamiento, a amar, a no juzgar, a divertirse, a reírse hasta en los momentos más complicados de la vida, a bailar con el alma, a entender que equivocarse está bien y si hacemos el trabajo esas equivocaciones nos permiten crecer, a no parar hasta encontrar cada cosa que los haga sentirse en bienestar y plenitud, a tener miedo y aún así moverse cuando sea necesario.
Ser mamá de mis hijos me tiene completamente enamorada, nada se compara en esta vida con la emoción y satisfacción de irlos descubriendo como seres individuales fuera de cualquier expectativa que como mamá pueda tener… esa fortuna y privilegio, son sin duda alguna, un regalo de vida para mi y estoy segura que para muchas de ustedes o de sus mamás también lo es.
Feliz Día de las Madres para todas las que lo son, por elección o por la razón que sea, lo estamos haciendo bien, siempre y cuando nos movamos desde el amor a nuestros hijos, nos hemos equivocado y lo seguiremos haciendo en el camino, honra tu proceso, tu aprendizaje, tu experiencia, hónrate a ti y a tus hijos, no permitas que nada ni nadie los lastime o les estorbe para crecer como seres humanos libres y felices. ¡Disfruta el maravilloso camino de ser mamá!
Así es, movernos desde el amor, aceptarnos imperfectas, pero hacer y ser lo mejor que podamos por ellos y por nosotras mismas.
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Divinamente mamás imperfectas, moviéndonos desde el amor… Lo estamos haciendo bien!!!
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